lunes, 29 de abril de 2024

Traigo los cerros de mi puerto en el alma

No conozco otra manera de sentir

Fluctuar de un valle profundo a la cima de un tirón en milisegundos repetidas veces en un día, cosa cotidiana

Todo varía a mis adentros tan rápido

Tanto disgregado


Cambiar de silla como se respira, ver todos los ángulos, sentir las sensaciones todas, 

todas

Mirar como desde un vagón todas las posibilidades bailando mientras divago

Burlonas pasean

Desfilan en mi nariz 

Cada situación despliega un nuevo menú detallado

Tan pronto como voy mirando ya se plantaron cinco caminos, o cinco emociones, reacciones, tonos de voz, fotografías, canciones

No siempre es igual 

Más bien lo contrario

Siempre varía 

Pero siempre

Siempre

Siempre sucede mientras se tallan en mis pieles todos los sentires posibles, en todos los bosquejos

Que solo quedan en eso

Bosquejos

Bosquejos de mi mente que elabora arte intangible, estéril 

Pudoroso, vergonzoso


Quiero traer también del puerto un poco del mar

Algo que apacigüe en un vaivén, que aunque impredecible, persiste, nunca acaba, siempre se impulsa, inagotable

Algo que humedezca un poco este aire que atora, ahoga

Que revolotee el pelo de rocío y le de tregua a la piel

Que varíe las presiones y genere ventiscas que limpien, que oxigenen 

Que haga volar las hojas secas y se lleve las semillas a tierras fértiles 

Un poco de mar que distraiga mis ojos perdidos, que me entumezca de belleza 


Un poco del puerto me quiero traer

Micros y gentes que frente a la cuesta más empinada resiste e insiste en sacar su jugada 

Cerros de tantas piernas cansadas 

Vientos de tantos suspiros 

Arenas de tantas piedras

Formando el colchón en la playa


Un poco de esa escarcha de luna y sol en el mar, brillitos benditos 

Un poco de esa desesperanza vestida de bohemia

Un poco de ascenso a rieles, de ese que cruje pero alcanza

Unos cuantos murales que me griten lo que siempre olvido

Uno que otro organillero que interrumpa la cadena caótica de mi pensar

El contraste de lo bello y lo vulgar

Del arte y lo mundano 

De hacer arte de lo mundano 

De eso que avergüenza, que sonroja 

Que incomoda, que alborota 


Llevo un poco de ese puerto en mi cuerpo 

Cargo un poco de ese aliento en el pecho

Desprendo un poco de mi adentro en sus vientos. 

Me desintegro. 


domingo, 14 de abril de 2024

Dolores punzantes, latentes

Me recuerdo que es el proceso

voy en el examen

el fin para alcanzar el principio de un largo siguiente

el monstruo de la etapa

sangrante etapa, infinita.


¿De qué otra manera podría ser?

Romper patrones

despedirse de tantas versiones de mí

obsoletas para el régimen de tallarme

a mi medida, con mis mínimos

caminar lenta y quizá erráticamente hacia ser lo que admiraría.


Despedirse de tanto

reacomodar partes en el castillo

remodelación estructural

todo mientras se agolpan recuerdos

tantos recuerdos

todo mientras otra capa inventa nuevos

nuevos inexistentes

destinados a morir en el momento en que toman forma,

colores, luces, sonrisas y rabias

destellan y se desintegran

casi imperceptibles

pero dejan su estela. 


Desprendiéndose desgarran

duele hasta la última célula

hasta el último recoveco del laberinto infinito

cuántas grietas.


Me recuerdo que es el proceso,

el monstruo de la etapa

estrujaré hasta el más mínimo detalle,

buscaré todas las piezas.

Me recuerdo que es el proceso,

el monstruo de la etapa

atenta a todas las lecciones

estudiar cada detalle.

Me recuerdo que es el proceso,

el monstruo de la etapa

mi brazo recuerda que todo se acaba,

mis deudas presionan, mis dudas me azotan.

Me recuerdo que es el proceso,

el monstruo de la etapa

me tiembla el cuerpo,

me falta el aliento.

Me recuerdo que es el proceso

que todo se acaba

crece una idea, elaboro teorías

nueva tarea, respira, tranquila.

Me recuerdo que es el proceso

que todo se acaba, termina

me recuerdo que es el proceso, 

ya pronto se acaba, 

respira.


miércoles, 3 de abril de 2024

Desprendo las cobijas que mi cuerpo armó

para arropar la especie

en mi vientre.

Sin posibilidad de renuncia renuncio a la energía que necesitó

para preparar

para formar

para abrigar

para alimentar

lo que no llegó

y que es toda la reserva 

a la que no puedo acceder

para prepararme, formarme, abrigarme ni alimentarme a mí.


No puedo consumir lo suficiente de este mundo

para llegar a ser parte de él

no alcanzo a descifrarlo

mientras intento descifrarme

no logro adaptarme

me despedazo en el intento

porque no logro caber en 'lo restante'

menstrúo mis esperanzas

mis energías malgastadas

desprendo mi entrega desmedida

vierto mi llanto

menstrúo.


Y demandaría todas las reservas

en estado de emergencia

requiero todo

lo que haya al alcance

para pegar mis pedazos

pero menstrúo

me menstrúo.